Dan el último adiós a Flor Silvestre con una misa en la que no faltaron los mariachis, como ella quería

El pasado miércoles el mundo de la música, el cine y el arte en general se vestía de luto tras la muerte de una de sus grandes estrellas, Flor Silvestre, quien fallecía a los 90 años en su rancho de Zacatecas.

Este jueves, la familia al completo entre quienes se encontraba Pepe Aguilar y su hija Ángela, muy afectados ambos, le despedían en un funeral por todo lo alto en el que no faltó la música, fiel compañera de la veterana actriz.

A ritmo de banda y mariachi, los músicos estuvieron presentes en la misa especial dedicada a la inolvidable artista. Unas intervenciones que hicieron de este homenaje uno muy especial, como a ella le hubiese gustado.

Durante el camino a pie escoltando el féretro de esta leyenda viviente se pudo observar a la joven cantante devastada y sin despegarse de ella, su gran musa y ejemplo a seguir a la que también despidió en redes con profundo dolor.

El último adiós tuvo lugar en su rancho El Soyate que se llenó de coronas y adornos florales para despedirla como se merecía. Un auténtico homenaje a una diva de la canción que marcó una época dorada que sirvió de inspiración a las generaciones vendieras, entre ellas la de su hijo y su nieta.