Entre recuerdos y lágrimas, velan al luchador “Súper Porky”

Amigos, familiares y compañeros acudieron al llamado para velar sus restos, que serán sepultados este miércoles en el panteón San Isidro, en la alcaldía de Azcapotzalco

José Alvarado Nieves, el Brazo de Plata o “Súper Porky”, murió con una sonrisa marcada en su rostro. Tan parecida a las que solía arrebatar a los aficionados con su picardía y carisma en el ring.

Así prefieren recordar Psycho Clown, Goya Kong y Muñeca de Plata a su padre, quien en los últimos años se apoyaba en una andadera para seguir en la batalla.

Nunca se rindió y es un ejemplo invaluable que atesoran. “Dejó todo en la lucha libre, por nosotros, por su afición, por eso es que muchos lo quieren. Se murió con una gran sonrisa y eso me deja tranquilo, porque se fue feliz”, comparte Psycho.

“Siempre fue agradecido y bendecido por la lucha libre, a él le gustó sonar en grande y con todo respeto compartimos este momento”, agrega el enmascarado, quien oculto tras la máscara, también esconde su dolor.

«Vivió como vivió y fue feliz, queremos que así se le recuerde», advierte. «Quedaron muchos homenajes en vida, esto nos tomó por sorpresa a todos pero vamos a hacer un recorrido por todo el país, como él lo merece».

La tercera fue la vencida para el «Porky», quien ya había salido con la mano en alto frente a dos infartos previos, recuerda su heredero.

«El sufrió un par de infartos, primero en la Arena Coliseo, unos años después otro, pero siguió luchando y este tercer infarto no lo pudo evitar. Se sintió mal, fuimos a una clínica pequeña e intenté llevarlo al hospital pero él quiso ir a su casa».

Más tarde, el anunció fatal lo apabulló. «Pero logré agradecerle que nos haya enseñado a trabajar desde muy pequeños. Me va a hacer mucha falta pero siempre me dijo que estaba muy orgulloso de nosotros».

Alvarado pareció presagiar su adiós desde hace unas semanas y lo hizo donde mejor se sintió, en una arena de lucha libre.

«Fue en la Arena Pachuca, antes de salir al ring me dijo que era la última vez que iba a pisar esa arena».

También se despidió de familiares y amigos, una última gira simbólica. «Así lo van a recordar. Siempre apoyando a todos, dejando un buen sabor. Se fue mi héroe y solo nos queda hacer lo que nos heredó con mucha pasión», agrega Goya Kong.

«Vamos a extrañar sus consejos, su compañía, todo», alcanzó a decir la menor de la dinastía, la Muñeca de Plata.

Amigos, familiares y compañeros acudieron al llamado para velar sus restos, que serán sepultados este miércoles en el panteón San Isidro, en la alcaldía de Azcapotzalco.

El Universal