Estoy muy endeudada por la falta de mi beca: mujer afectada por el Conacyt

Desde hace siete meses el Conacyt no entrega la beca a madres jefas de familia que estudian una licenciatura. Hasta ahora les deben 28 mil pesos.

Desde hace siete meses el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) no entrega la beca de 4 mil pesos a las madres jefas de familia que estudian una licenciatura, por lo que ahora estas mujeres se han endeudado para cubrir sus gastos escolares.

En esta situación se encuentra Narda Rodríguez, quien estudia química ambiental en la Universidad Tecnológico de León y tiene dos hijos de 4 y 8 años. Asegura que ya no cuenta con los recursos para continuar pagando las colegiaturas cuatrimestrales de 2 mil 700 pesos, y costear los uniformes y materiales escolares de sus dos niños.

Lo anterior porque no ha recibido su beca Madres Jefas de Familia para Fortalecer su Desarrollo Profesional, y a que el negocio de maquillaje que tenía salió afectado por por la pandemia Covid-19.

“No sé si voy a seguir estudiando, porque ya llegó la colegiatura de mi hijo y útiles y ya no tiene uniforme ni zapatos para la escuela. No sé si voy a poder seguir estudiando, porque contaba con este dinero (el apoyo) para solventar (gastos) y seguir estudiando”, dice en entrevista con Forbes México.

Cuenta que la beca que le daba el Conacyt de 4 mil pesos mensuales y 2 mil anuales le ayudaba a cubrir algunos sus pagos escolares, ya veces para cubrir la renta del departamento en el que vive con sus hijos. Ante el retraso del dicho organismo, señala que ahora ha tenido que pedir prestado a sus familiares y amigos para poderlo hacer

“De alguna manera cuando pasó la pandemia, decía que tenía la beca, y cuando no llegó, pedí préstamos. Sí se me ha complicado, porque estoy muy endeudada, porque tengo que pagar la deuda. Mi exesposo me da una parte (para la renta y comida) a veces también mis papas. Me causa ansiedad el no saber si nos van a depositar; hemos marcado, y no contestan. No sabemos si nos la van a entregar”, narra.

Ella calcula que hasta el momento ya debe 10 mil pesos, por lo que ahora reflexiona si buscará un trabajo de tiempo completo para poder pagar sus deudas y necesidades o continuar estudiando.

Nos pague o no Conacyt, no dejaré la escuela
A Iris Rosales no sólo le afectó que el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) se retrasara con su beca de Madres Jefas de Familia para Fortalecer su Desarrollo Profesional, de 4 mil pesos mensuales, también le perjudicó la falta de medicamentos y quimioterapias para niños con cáncer, pues tiene un hijo de 6 años linfoma Hodgkin.

“Ha sido difícil, porque tengo que dividir mi tiempo, me tengo que esforzar un poco más. La presión de no tengo dinero, mi hijo está enfermo, tengo mucha tarea, el trabajo me exige. En mi caso ha sido más que frustrante. Intento no dejarme caer por el niño, porque su lucha (la de mi hijo) es más fuerte que la mía: si él puede, yo puedo”, narra a Forbes México.

Desde hace siete meses, cientos de mujeres no reciben su beca de Madres Jefas de Familia para Fortalecer su Desarrollo Profesional, la cual otorga el Conacyt a madres mexicanas solteras, divorciadas, viudas o separadas, que estudian la universidad.

Iris Rosales, quien estudia en el Instituto Tecnológico de la Zona Maya, cuenta que la beca que le daban era para solventar sus gastos relacionados con la escuela, como la colegiatura de mil 200 pesos al semestre, las mensualidades para pagar su computadora y el internet para hacer sus trabajos escolares, y a veces para cubrir las necesidades de su hijo.

“No se como le voy a hacer, vendiendo o no sé, pero no creo dejar la escuela, porque el papel habla mucho. Te piden que estés preparado para tener un nivel trabajo pues bien. Pase lo que pase, nos pague o no Conacyt, no creo dejar la escuela. Mi voluntad es más fuerte”, dice.

Las mujeres que son parte de esta beca deben mantener promedio mínimo de 8.0; no tener materias reprobadas; ser madre soltera, divorciada, viuda o separada, de nacionalidad mexicana, que funja como Jefa de familia; estar inscrita y cursando estudios profesionales, en un programa presencial, de sistema escolarizado y de tiempo completo de educación superior, técnico superior universitario o licenciatura en la Institución pública.