«Para los amigos favores y para los enemigos la Ley»

Artículo de opinión

Por: Roxana Alanis Reyes

Hace días, escuché en una serie de televisión, la siguiente frase: «para los amigos favores y para los enemigos la Ley»,referente en la situación en la que salió esta expresión, se estaban refiriendo en defender la injusticia y aplicar toda la ley a los afectados, esto por una muy buena suma de dinero.

Pero, me cuestiono, qué tan lejos estamos en la vida real. Tal vez estas palabras trascendieron en una simple historia, donde se monta todo un drama, es decir, de cómo se maneja el gobierno, cómo actúa una sociedad en crisis, entre otras acciones que se ven en la vida diaria, y que no pasa solo en las películas.

Y esque sí, desafortunadamente estamos viviendo en una sociedad donde cada vez se van perdiendo los valores, en una sociedad donde tampoco ya no existe la ética, mucho menos la responsabilidad y la empatía. En la actualidad, la mayoría de las veces las personas comunes y corrientes, como el pobre, el asalariado, el simple empleado, así como los sectores vulnerables, terminan perdiendo cualquier juicio o demanda, porque para ellos sí existen las leyes, para ellos sí existen los reglamentos, sí existen los estatutos, para ellos sí es corrupción todo lo que cometen; pero tal parece que para los superiores, los jefes, los de alto rango, para un político, o para los de clase alta, no existen tales leyes, pues se las pasan por el «arco del triunfo» , donde nadie sabe, nadie supo.

Nosotros, como sociedad, hasta cuándo vamos a permitir tantos atropellos, tantas injusticias; hoy en día tal parece que puede más el poder y el dinero, aunque perjudiques y traiciones en todas sus formas, hasta a tu mejor amigo por unos cuantos pesos o por un puesto.

Con esto, tampoco quiero culpar al gobierno anterior o al actual del sin fin de actos de corrupción en las que se manejan en muchas partes, porque eso ya no depende de las instituciones o empresas, sino de la persona que llegan a esos puestos por palancas, dedasos, o por corruptos, y son estos los que manchan el nombre de la institución, de la empresa e incluso hasta el de un partido político.

Necesitamos a una sociedad de mente más abierta, donde ya no nos manipulen tan fácil, tanto en el contexto político como ciudadano. Donde no nos dejemos llevar por lo que vamos a recibir; necesitamos ser mejores analistas, mejores críticos, no fanatizarnos con una sola idea, recuperar datos aquí, datos allá, para así crear nuestro propio criterio y ver la realidad desde el ámbito en el que nos encontremos.

Roxana Alanis Reyes
Comunicologa.

Egresada, titulada de la licenciatura en Comunicación por la Facultad de Letras y Comunicación de la Universidad de Colima.